DESCRIPCIÓN

El péndulo inverso, básicamente, consiste en un hilo de gran longitud, anclado en su parte inferior y conectado por su extremo superior con un flotador sumergido en aceite. Debido a su capacidad para mantenerse siempre en posición vertical, es un sistema fiable y de sencillo funcionamiento para conocer el desplazamiento de una estructura, utilizando como referencia un punto inferior del terreno sobre el que se asienta.

Las aplicaciones más comunes son: el control de movimientos en pilas de puentes, edificios de gran altura y presas. En muchas ocasiones va asociado a un péndulo directo para, superponiendo dos o más tramos, obtener los movimientos de toda una estructura, respecto a un punto profundo y estable del terreno.

Para medir los movimientos se coloca un coordinómetro en cada uno de los puntos que quiere controlarse. Con este equipo se obtiene el movimiento del hilo en dos direcciones perpendiculares entre sí. Los incrementos de desplazamiento se obtienen por diferencia entre las lecturas actuales y las tomadas inicialmente, tras la instalación.

El recipiente y flotador diseñado por ATI, es uno de los más pequeños del mercado, sin que por ello se reduzca el rango de medida, además se facilita el montaje y el nicho de ubicación puede ser más pequeño.

Gracias a una sólida fijación de las estructuras donde se apoyan los coordinómetros, se consigue detectar movimientos inferiores a 0,1 mm.